“Los promotores me dieron drogas y alcohol en restaurantes y clubs”, dijo la estrella. “Ser una celebridad puede ser peligroso. Nadie dice “no”. Ese es el motivo por el cual muchos terminan con una sobredosis y muriendo. Podría haberme pasado a mí”.
Mientras que Lovato logró entrar al camino de la recuperación, Monteith fue víctima de esos problemas. La estrella de Glee, quien pasó 30 días en rehabilitación en abril, fue encontrado muerto el pasado sábado en su habitación de hotel en Vancouver. El actor falleció de una sobredosis de heroína y alcohol.
Ante la muerte del actor, Lovato dijo a People el miércoles. “Él no eligió morir, fue la enfermedad. Puede arrastrarte en cualquier momento, sólo se necesita un momento de recaída para potencialmente morir. Es realmente aterrador pero espero que luego de esto, las personas sean capaces de verlo como una enfermedad muy peligrosa”.
Incluso años después de su tratamiento, Lovato continúa evitando las fiestas de Hollywood para mantenerse sobria: “No voy a clubs. Sé que es algo que no puedo hacer sin sentirme tentada”.
Ahora que fanáticos, amigos y familiares lloran la repentina muerte de Monteith, los pensamientos de Demi se centran en una persona en particular: Lea Michele, la novia de Cory.
“La primera persona en mi mente es Lea. Estoy rezando mucho por ella. La quiero mucho. Le deseo mucha fuerza en este momento”, aseguró.
Con información de Celebuzz
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