“Britney Spears, un negocio” es el título que lleva la revista Vegas en su edición del mes de febrero, la cual presenta en su cubierta a “La Princesa del Pop” en todo su esplendor, luciendo un cuerpazo y un rostro de infarto.
El título del tabloide tiene que ver con el éxito que está conquistado la rubia con su residencia en Las Vegas y su interminable lista de conciertos en el Planet Hollywood, para los cuales los boletos ya han sido agotados por sus fieles fans.
Vestida con un monokini negro ceñido a su curvilínea figura, con alas colgando en sus brazos y su intensa cabellera rubia, Britney posó para el lente de Michelangelo De Battista y compartió algunos detalles de su show “Britney: Piece of Me”, y reveló también cómo es que organiza su tiempo para estar con sus hijos.
“Tengo una agenda muy ocupada. Creí que podría tener una vida normal con mis hijos. Tendré algunas noches en las que regresaré a Los Ángeles después del show y otras noches me quedaré en Las Vegas”, comentó la interprete.
La estrella manifestó disfrutar por completo de su faceta como madre. “Cuando soy mamá, soy completamente una mamá. Todo el tiempo me preocupo, y siempre estoy pensando sobre lo que deberíamos estar haciendo o no. Pero cuando estoy en el escenario, es como mi terapia. Tengo la oportunidad de ser esta persona que realmente no soy. Es muy forma forma de salirme de mi propia cabeza y divertirme”, apuntó.
Sobre “Britney: Pieces of Me”, afirmó sentirse “nerviosa por la noche de estreno”, pero aseguró que hoy cuenta con más madurez e inteligencia que en sus tiempos de adolescencia. “Estoy ansiosa de que llegue esa primera noche y poder comenzar con el siguiente show. Quiero que haya suficiente baile, suficiente canto y quiero que sea algo mágico”, dijo.
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