
“Siento como si siempre me estuviesen mirando. Quiero broncearme en topless en algún lugar y sé que probablemente nunca podría hacerlo. Inclusive, si estoy en mi habitación, con las cortinas cerradas, siento que hay un paparazzi afuera o alguien espiándome”.
La cantante barbadense también confesó que cuando estaba en el colegio, se burlaban de ella: “Creo que esas experiencias fueron puestas ahí estratégicamente por Dios para prepararme para estar en la industria de la música. Es tan fácil para mi hacerle frente a toda la basura ahora” , sentenció.
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